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¿La inteligencia artificial nos va a dejar sin trabajo? En nuestra historia de esta semana compartimos aprendizajes para facilitar la experimentación con IA, incluyendo cómo construir mejores prompts y construir integraciones con otras plataformas. Son experimentos que nos ayudan a imaginar un futuro en el que colaboramos activamente con los algoritmos.

Pero antes, algunas cosas que podrían interesarte:

🔎 Hace unos días se publicó el Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial, que evalúa las condiciones para la adopción de IA en 12 países de la región.

🏔️ Techsuyo 2023. La conferencia que reúne a la comunidad profesional peruana en las áreas de tecnología e innovación será el 6 y 7 de septiembre en la ciudad de Arequipa.

🧑🏽‍🏫 Design Talks & Networking - Mexico. Design Matters está organizando un evento gratuito en línea este 11 de octubre para conectar con la comunidad de diseño en México y América Latina.

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Hace unos años existía un mismo slide que formaba parte de todas las presentaciones existentes en el mundo sobre transformación digital: “La transformación digital es como el sexo adolescente. Todos están hablando de eso. Nadie sabe cómo hacerlo. Todos piensan que todos los demás lo están haciendo. Así que todos dicen que lo están haciendo”.

Ese podría ser un gran resumen de dónde estamos en este momento con la inteligencia artificial. Todas las organizaciones con las que converso últimamente tienen clarísimo que tendrían que estar haciendo algo al respecto, aunque sea porque todas las demás están haciendo algo al respecto. Y en realidad no están equivocadas: cada semana sale un nuevo estudio o un nuevo reporte mostrando evidencia de cómo la inteligencia artificial va a transformar el futuro de los negocios o la manera en la que trabajamos. Pero eso no quiere decir que tengamos aún un sentido claro de cómo se va a ver ese futuro de los negocios o del trabajo, y menos aún de que sepamos exactamente qué tendríamos que estar haciendo ahora mismo al respecto.

Para empezar, un poco de consuelo: no estás solo o sola en esto. Todos estamos mirando las novedades con una mezcla de curiosidad y ansiedad. Todos estamos preguntándonos por cuál debería ser el siguiente paso. Y la gran mayoría de personas que parecen tenerla clara, están mintiendo o por lo menos exagerando. No estamos en un momento de grandes certezas, sino en uno de preguntas interesantes.

Se ha vuelto también un cliché señalar que si bien no nos vamos a quedar sin trabajo, sí ocurrirá que aquellas personas que sepan utilizar la inteligencia artificial van a reemplazar a aquellas que no. Pero la figura completa es un poco más compleja: empezando porque algunos estudios preliminares muestran que no todas las ocupaciones están igualmente expuestas al impacto de los modelos de lenguaje como GPT-4. Existen algunos trabajos, como el desarrollo de software, que están mucho más expuestos que otros, como el trabajo agrícola. A inicios de este año, Buzzfeed decidió cerrar finalmente su unidad de noticias para pasar a producir la mayoría de su contenido utilizando inteligencia artificial, y en las últimas semanas hemos visto como la cuestión algorítmica ha estado al centro de las negociaciones en la huelga de los escritores y actores en Estados Unidos.

La preocupación por el impacto de la inteligencia artificial en el trabajo no es una preocupación especulativa, sino algo real y presente que está pasando a nuestro alrededor. Sin embargo todavía tenemos poca referencia de lo que eso significará en la práctica. En las últimas semanas he estado experimentando mucho con cómo integrar herramientas de inteligencia artificial, especialmente ChatGPT, en mis procesos creativos del día a día, y creo que he aprendido varias cosas que pueden ayudarnos a imaginar cómo se ve ese futuro posible de trabajo integrado por algoritmos. Hoy quiero repasar algunos de estos experimentos, especialmente alrededor de cómo mejorar los resultados que conseguimos de ChatGPT con mejores instrucciones y cómo integramos operaciones de análisis de inteligencia artificial con otras herramientas para ahorrarnos muchísimo tiempo y esfuerzo. Porque creo que de este tipo de pequeños experimentos podemos aprender mucho sobre cómo podría verse ese futuro del trabajo alimentado por algoritmos en el día a día.

Lo más importante que he aprendido es que este es un camino de ida. Una vez que empiezas a trabajar regularmente con estas herramientas, se vuelve imposible pensar en volver a atrás de la misma manera que hoy no pensaríamos en volver a trabajar sin correo electrónico, buscadores, o procesadores de texto. El futuro del trabajo es sintético, donde vamos a encontrarnos continuamente colaborando con algoritmos y agentes autónomos que nos ayudan a capturar, procesar, y producir información. Y este cambio no es algo que se va a decidir en las reuniones de directorio ni en las áreas de informática: es un cambio que se va a dar en las decisiones individuales que tú y yo vamos a tomar en los próximos meses sobre cómo trabajamos.

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¿Tú también sientes que tendrías que estar haciendo algo en tu organización sobre inteligencia artificial pero no sabes por dónde empezar? Contáctanos para contarte más sobre charlas y talleres con los que podemos ayudarte.

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